Celebrando el biorritmo de Invierno...



Human... The Killers


No ir de victima y quejarse, no ser ególatra y pedir explicaciones..... Sigue caminando y encontrarás las respuestas que necesitas...

Ayer, de vuelta a casa tras celebrar el biorritmo de invierno, una "Harley" impresionante muy parecida a la de la imagen, nos "escoltó" durante una gran parte del trayecto... Al principio sonreí y no le di importancia pero tras observar que, semáforo a semáforo, se paraba a mi lado y que, además, llevaba unos altavoces por dónde se escuchaba una música familiar...empecé a prestarle atención consciente...

Para mi "deleite" la música que sonaba era "Human" de The Killers y, entonces, ya tuve claro que era una señal relativa al taller que acababa de cerrar...


Otra curiosa sincronía fue que al llegar a casa por la tarde la película que se estaba visionando en el televisor era Posdata: te quiero... a la que dediqué una entrada titulada "De como cerrar etapas en forma positiva"..



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Experiencias compartidas:

Para confiar en la vida, en ti mismo y en tus ideas, tienes que confiar en tus sentimientos y para confiar en tus sentimientos tienes que tener tus límites claros, saber dónde empiezas tú y donde acaba el otro. Y para recuperar la confianza en ti mismo, en lo que sientes, en lo que piensas, en lo que haces o hiciste…. Tienes que recuperar la confianza en tu memoria emocional, que está depositada en tu cuerpo, en tus huesos, en tus músculos, en las posturas y actitudes físico-mentales (son una misma cosa), que día a día ASUMES….
El compromiso con la vida pasa por el compromiso contigo mismo…. 
Esto es lo que me queda claro tras mi paso por el biorritmo de invierno 

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Este taller me da muchas respuestas a preguntas que desde hace unos meses me planteo. Es como si el universo me respondiera de forma personalizada. Tengo claro mi déficit, el biorritmo diario. Pese a que lo he escuchado muchas veces, parece que en este taller se simplifica al máximo para poder penetrar en mí. Siente como estás durante todos los momentos del día, ¿Como me siento cuando me levanto, cuando desayuno, que sensación tengo al ponerme a trabajar, durante el trabajo, en la comida etc.?… Siente en qué momento pierdes la sonrisa y analiza el contexto. Rectifica con todo lo que sabes y vuelve al equilibrio. Acaba el día bien, positivándolo todo, porque así empezarás el siguiente. Lo mismo con las semanas y el año. 

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Durante esta semana tenía la sensación de que el taller de invierno era la celebración del fin.
Sabía que algo de mi iba a morir y el taller fue un regalo, quería celebrarlo y así lo sentía, fue la despedida y el inicio, renacer a la vida siendo consciente de mi compromiso, ahora estoy lista para hablar de unidad y de la tierra como un todo.
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En los talleres de biorritmos se transmite una conciencia global/grupal/de humanidad que se impregna en nuestro ser y después funcionamos – vivimos con esa referencia. Sería como el valor primordial que dirige nuestros pasos. En el, día a día, quizás se pierde esa perspectiva, pero en los momentos de reflexión - centramiento vuelve. Vi con más claridad que los conceptos de los biorritmos se repiten, son siempre las mismas bases. Lo que los hace integradores es que Ana en cada sesión los presenta con perspectivas diferentes y por eso creo que sin darnos cuenta, nos vamos impregnando de ellos. Para la parte pensante concluimos con el compromiso de observarnos en todo momento para no perder el buen humor. Yo ya llevo días observándome de forma continuada y apuntando, pero ahora tengo una consigna sencilla para hacerlo: ¿con qué humor me encuentro? Si lo he perdido, ¿qué me ha hecho perderlo? Y este es el hilo del cual ir tirando.

Temas para este trimestre: cerrar el año, dejar en su sitio el tema familia, leer los textos del blog.

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No he visto la película de El hombre bicentenario, solo vi el final, pero sí que he integrado el concepto que Ana quería transmitir, que una persona para hacerse humana, de verdad con todas las letras, necesita pasar un proceso y es emocional-físico-mental. Realmente hay un cambio de células, órganos…me parece increíble que estemos haciendo ese trabajo y tiene todo el mérito.
Como siempre Ana nos ha transmitido el lado mágico y bello de la vida, quizás por eso sigo yendo a estos talleres, todavía no tengo este sentimiento por mí misma, se me disipa en el día a día.

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Hablamos de luchar o huir, en esos momentos pensé que era más propio de mi, y sin lugar a dudas me he pasado gran parte de mi vida huyendo, sin embargo no recuerdo ninguna situación en la que halla luchado.

Me quedo con el compromiso adquirido por todos los asistentes de observarnos diariamente al levantarnos, a la hora de comer, en el trabajo etc.. Conocer nuestras emociones y averiguar de dónde vienen.

Termina el taller hablando de la importancia de cerrar el año positivamente, para ello es necesario hacer una valoración por todos los espacios en los que hemos pasado. 
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Considero que las celebraciones de biorritmos son la base para reconectar para los que todavía nos cuesta mantener, vivir los biorritmos día a día y momento a momento. Personalmente, las celebraciones me aportan plenitud y fluidez, ya que todo comienza a cobrar sentido, a encajar del modo más sencillo.

Son una ventana, una ventana real que abrimos, la cual nos muestra la armonía, la sencillez, el VIVIR con mayúsculas, todo lo que con tanta gracia nos muestra Ana. Escuchas y piensas, ¡vaya! Cierto, unificas e integras la historia con el momento actual, la memoria del mundo; diría que ves los hilos. Además lo veo tan fácil en ese momento y en el tiempo posterior, hasta que entro en mi película personal. Es mantener esa luz y exportarla. Tomar consciencia, priorizar. Mantener la imagen, el sentimiento durante el biorritmo, Estos encuentros los considero un refuerzo, un hito, cumpliendo su objetivo de celebración.

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Hasta aquí las valoraciones compartidas en esta ocasión... Gracias a todos.

La impresión recibida, en este último taller de invierno, es que, durante todo este trimestre otoñal, hemos sido examinados en relación a nuestra "conciencia de humanidad" que no es otra que nuestra propia conciencia reflejada en el cómo nos relacionamos y fijamos en los demás... También percibí cada uno de los asistentes se llevó "puestos" los deberes para el próximo año en función de su respuesta a las claves allí expuestas... Todavía hay a quien le sorprende escuchar que la imagen que percibimos del mundo es un reflejo de nuestro propio mundo interior...