Vuelve a casa, vuelve por Navidad





No quiero dejar atrás las fiestas navideñas, sin hacer una reflexión holística sobre lo que realmente celebramos en las festividades generadas alrededor del Solsticio de Invierno.

¿De dónde viene este sentimiento navideño?
¿Qué fue antes el solsticio o la fiesta de Navidad?



¿Por qué en la Navidad se ha generado la emoción-imagen colectiva de estar junto a la familia y junto a las personas que amamos? ¿Por qué se ha generado la imagen de amor a la humanidad, precisamente en estas fechas?   

Tocar las «campanas-cascabeles», respirar, cantar, ver una película, hablar, comer, en compañía de nuestros seres queridos es ESENCIAL para ponernos en hora y sincronizar nuestros corazones con el resto de la humanidad…

Para ponernos en hora con la vida lo único que podemos hacer es sincronizarnos y actualizar con nuestra familia o con nuestra pareja… el resto NO DEPENDE de nosotros.


Y este sentimiento de RECUPERAR aquello que es propio de la humanidad emerge con fuerza cada vez que un nuevo ciclo de luz nace. Con esto quiero decir que el amor es lo que mueve la evolución humana, el amor a nuestros padres, hijos y compañeros y que es la ausencia de este amor el que bloquea dicha evolución…Que este sentimiento emerja con fuerza en el periodo invernal tiene que ver con los biorritmos que afectan a la conciencia humana y que en este periodo mantienen a la conciencia individual (o ego personal) bajo mínimos (esta conciencia está en su máximo en el solsticio de verano ya que se potencia ilumina con la luz del sol). Por lo que podríamos decir que la conciencia grupal estará en sus máximos hasta la llegada de la primavera e irá menguando hasta el mes de junio…

También quiero decir que todo lo que a lo largo de los siglos hemos depositado en la figura de dios (sea cual sea su forma o imagen creada), es tan sólo una proyección de nuestra propia conciencia de divinidad. Es por ello que hoy he querido recuperar la conocida oración de la Serenidad porque pienso que hay que dejar a dios tranquilo y tomar nosotros mismos el control de nuestras vidas como seres dotados de auto conciencia que somos.

-La Serenidad que le pedimos a Dios tenemos que mostrarla con nuestros padres, hijos y parejas y proviene del mantenimiento de unos hábitos que refuercen nuestro equilibrio emocional.

-El valor que tenemos proviene del amor compartido en el aquí y el ahora, amor que se cultiva compartiendo momentos de calidad y la sabiduría…

-La sabiduría es un manantial que brota de los corazones serenos y valerosos cada vez que se encuentran con un corazón, triste, roto o cansado…


Le deseo a tu dios interior un feliz año...

El dios interior es la voz de la conciencia que anida en todos nosotros y que según la evolución de la conciencia es proyectado en dioses o figuras externas…